Video: https://www.youtube.com/watch?v=QPMe92zH6Ik
El documental Puente Llaguno, claves de una masacre,
dirigido por Ángel Palacios, demuestra la trama golpista de la oposición en
abril de 2002 y cómo engañaron a sus seguidores y al mundo en torno a un suceso
que pretendía —por medio de la violencia y muertes de ciudadanos, con apoyo de
medios de comunicación de derecha— sacar al Gobierno constitucionalmente electo
de Hugo Chávez.
La cinta, producto de una investigación audiovisual sobre los hechos
registrados hace 14 años, muestra imágenes, testimonios y hechos clave de una
acción desestabilizadora silenciada por los medios de derecha que dejó 19
muertos y 72 heridos de bala, entre simpatizantes del Gobierno como de la
oposición, y transeúntes desprevenidos de las calles aledañas.
Este lunes, a las 8:00 de la noche, el documental será transmitido en
transmisión conjunta de radio y televisión en una edición especial de Tv Foro,
que será conducido por el director general de la Comisión Nacional de
Telecomunicaciones de Venezuela (Conatel), William Castillo, acompañado de un
grupo de invitados.
La difusión del material tiene por objetivo avivar la conciencia
del pueblo ante nuevas acciones desestabilizadoras de sectores de derecha, que
promueven una movilización para el 1 de septiembre en medio de la gestación de
un nuevo plan golpista denunciado por el Ejecutivo.
Al respecto, el presidente Nicolás Maduro indicó este sábado que
observar el material permitirá a quienes vivieron aquellos eventos sacar
"lecciones para nuestra conciencia de lo que hicieron y no lo permitamos
más nunca", mientras que las nuevas generaciones podrán ver "lo que
hizo la oligarquía para quitarle el derecho al futuro que tenían los niños del
año 2002, que son hoy los jóvenes universitarios y profesionales de la patria,
gracias a que triunfamos contra el golpe de Estado".
Derecha planificó sucesos de 2002
Puente Llaguno, claves de una masacre relata cómo los factores políticos de oposición eligieron el mes de
abril de 2002 para iniciar una huelga general, con el propósito de forzar la
renuncia del presidente Chávez. Para ello, la derecha convocó a una
movilización que llegaría hasta Chuao, en el este de la ciudad, mientras los
revolucionarios se encontraban en las afueras del Palacio de Miraflores, sede
de Gobierno, en respaldo de la Revolución Bolivariana y en rechazo al paro.
Ese día, en horas del mediodía, la oposición hizo un llamado a sus
simpatizantes para dirigirse hacia la sede del Gobierno, sin ningún tipo de
consentimiento del orden público y sin haber detallado esa ruta previamente. El
objetivo: encontrarse con el pueblo revolucionario, y dar paso a la masacre, ya
que apenas iniciado el nuevo rumbo de la movilización opositora dos personas
resultaron heridas de bala a quemarropa, es decir, resultaron heridas desde la
propia marcha.
Cuando la movilización opositora llegó al centro de Caracas, se
registraron agresiones contra personas que manifestaban su apoyo a la
Revolución, resultando heridas con ácido y por golpes. Los medios registraban
lo sucedido, pero afirmaban que la movilización estaba caracterizada por la paz
y por no contar ni un solo hecho de violencia.
Los dirigentes de oposición insistieron en que los manifestantes
llegaran hasta Miraflores. No obstante, se retiraron y dejaron a sus
simpatizantes, aludiendo diferentes motivos, justo antes de que empezaran
las primeras detonaciones de bala en las adyacencias de la avenida Baralt y
Puente Llaguno.
Por otra parte, un grupo de militares insurgentes grabó un mensaje
horas antes de los hechos de violencia, en los que revelaban datos como los
francotiradores y las cifras de víctimas por adelantado. Además, la Policía
Metropolitana comenzó a agredir a quienes se encontraban en la parte baja de la
avenida Baralt, desde la esquina Pedrera, y debajo de Puente Llaguno.
El primer fallecido, se reseña en el documental, cae en la avenida
Baralt por herida de bala en la cabeza a las 3:20 de la tarde, aproximadamente.
12 civiles fallecieron en ese sector, luego que la Policía Metropolitana
rompiera los cercos acordados previamente con la Guardia Nacional. Otras siete
personas murieron en zonas aledañas.
Conspiración mediática
El material de Ángel Palacios también relata cuál fue el comportamiento
de los medios privados durante la consumación del golpe del 11 de abril. Ese
día, en horas del mediodía, el diario El Nacional sacó una
edición extra bajo el titular "La batalla final será en Miraflores",
mientras que el canal RCTV transmitió seis horas de la manifestación opositora
y tan solo 20 minutos de la chavista y, como otros medios de derecha, llamó
insistentemente a que los manifestantes de oposición llegaran hasta Miraflores,
bajo el lema "Ni un paso atrás".
Mientras asesinaban y herían a los manifestantes de ambos bandos,
sucesos que eran transmitidos por medios como Venevisión, los reporteros
informaban que eran "desmayados", restándole importancia a lo
ocurrido. Además, aseguraban que los bolivarianos le disparaban a la marcha de
la oposición que se encontraba debajo del puente, cuando ésta nunca llegó a ese
punto.
Entre los dirigentes de oposición que participaron en el plan golpista
de 2002 y que pidieron a sus manifestantes que llegaran hasta Miraflores se
encuentran Henrique Capriles, Carlos Molina Tamayo, Guaicaipuro Lameda,
Enrique Mendoza, entre otros.
Fuente: http://www.avn.info.ve/contenido/quotpuente-llaguno-claves-una-masacrequot-demuestra-trama-golpista-derecha-2002